La muerte de un ser querido es uno de los momentos más difíciles que podemos enfrentar, y en el ámbito laboral, surge una pregunta clave: ¿tienen los trabajadores en México derecho a un permiso remunerado por luto? Actualmente, la Ley Federal del Trabajo (LFT) no contempla de forma obligatoria este tipo de permisos, dejando a discreción de las empresas el otorgamiento de días libres con goce de sueldo en estas circunstancias. Sin embargo,esta semana se presentó en el Senado una iniciativa para incorporar a la LFT permisos con goce de sueldo para ausentarse del trabajo en caso de fallecimiento de un familiar.
Desde 2023, la Comisión de Trabajo y Previsión Social de la Cámara de Diputados ha presentado propuestas para incluir un permiso por luto en la LFT, específicamente mediante la modificación del artículo 132. Estas iniciativas buscan que los empleados tengan derecho a entre tres y cinco días de permiso remunerado en caso de fallecimiento de familiares cercanos, incluyendo padres, hijos, cónyuge o hermanos.
El objetivo de estas reformas es brindar un respaldo emocional y financiero a los trabajadores, permitiéndoles enfrentar el duelo y realizar trámites sin perder ingresos. Las propuestas también consideran permisos para internamientos hospitalarios o intervenciones quirúrgicas de familiares, con el fin de apoyar en otras situaciones críticas de la vida familiar.
A pesar del interés en estas reformas, aún no existe consenso sobre los detalles. Algunos puntos en discusión incluyen la duración exacta del permiso y las relaciones familiares que cubriría. Además, para algunas empresas, especialmente las más pequeñas, esto puede representar un desafío financiero y operativo. Es necesario un enfoque equilibrado que permita tanto a trabajadores como empleadores adaptarse a esta posible nueva regulación.
Conclusión
El camino hacia un permiso por luto obligatorio en México plantea una oportunidad de transformar el entorno laboral en favor del bienestar emocional y la salud mental de los trabajadores. En momentos de pérdida, el apoyo laboral se convierte en un pilar fundamental para mitigar el impacto psicológico, ayudando a los empleados a enfrentar su duelo sin el temor de perder ingresos. Aunque existen retos en términos de adaptación y costos, especialmente para pequeñas empresas, el avance de estas reformas es un paso hacia un equilibrio necesario. Un permiso de este tipo reflejaría una cultura de respeto y apoyo en momentos difíciles, contribuyendo a fortalecer la relación empleador-empleado y promoviendo un clima laboral más humano. Esta posible regulación no solo responde a una necesidad social, sino que marca una evolución hacia prácticas laborales más empáticas y sostenibles.
Este cambio subraya la importancia de cuidar la salud mental en el ámbito laboral y reconoce que un entorno comprensivo y respetuoso contribuye al bienestar general y a la productividad de los trabajadores.
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